martes, 18 de octubre de 2016

                                                           AMOR SIN ESCALAS

COMO PREPARARSE PARA LAS ORGANIZACIONES DEL FUTURO

La película “amor sin escalas” habla de un especialista en Reducción de Personal de Compañías, en el que nos enseña como su empresa, apoya a otras organizaciones a realizar la penosa acción de despedir a un empleado a través de un intermediario que nunca ha conocido al sujeto en cuestión y que no tiene ninguna conexión con el de manera que facilita el proceso de informarle de su situación.

La persona encargada de hacer saber la noticia debía ser cuidadoso con lo que iba a decir y al mismo tiempo de ser sincero debía intentar motivar al ex empleado haciéndole saber que su vida no terminaba allí, sino que debía verlo como una oportunidad de dar un giro a su vida para seguir sus sueños, darse el chance de volver a hacer las cosas para buscar un futuro mejor.
Sin embargo la lectura menciona que las organizaciones evolucionan para adaptarse a los cambios competitivos y en este proceso aparecen importantes innovaciones organizativas y nuevas formas de competencia.

Si bien, la orientación hacia el cliente es el motor que empuja hacia el cambio basado en los procesos, este cambio siempre requerirá para hacerlo efectivo, un nivel de aprendizaje; tal como se puede observar en la película cuando Natalie crea un modelo más eficaz de despido por medio de una computadora, tras numerosos intentos por hacerlo funcionar ella va adquiriendo cada vez más conocimientos acerca del tema y sobre cómo mejorar en determinados aspectos. Por lo tanto se puede decir que el aprendizaje es el motor de formación del cambio.
Esto hacer referencia a las cinco disciplinas o capacidades descritas por Peter Senge, pensar en sistemas, capacidad personal, modelos mentales, construir una visión compartida y aprender en equipos.

También se puede percibir en la película que al término de cada despido se le indica al cliente abrir una carpeta en la cual se le ofrecen nuevas oportunidades para iniciar un nuevo ciclo y me parece que es un claro reflejo de la importancia que las empresas deben  darle a sus empleados.
Todo esto se relaciona con las empresas de hoy, que deben poner énfasis en la innovación, atención al cliente, precios competitivos, tiempos de entrega y en la calidad de sus productos y servicios. La adecuada administración de dichos factores determina la existencia de las empresas en la actualidad.

Las organizaciones exitosas, deben ser flexibles y sensibles para aceptar las diferencias sociales y culturales.
Al ser Natalie quien dirige el nuevo sistema de la compañía, Ryan se adhiere ahora al cambio y a los valores, metas y objetivos del nuevo estilo de trabajo, de la misma manera en que ella al unirse al equipo, tuvo que conocerlo bien, adaptarse a él, estar en él y socializar con los miembros de la empresa. Ella tenía un espíritu emprendedor, un espíritu de cambios, aunque tiempo después decida renunciar a su puesto.

“Amor sin escalas” es un ejemplo de la forma en que hay adaptarse a un nuevo mundo dentro del área laboral, a una nueva cultura en  una empresa para poder imponer un nuevo cambio y solo así, llegar a tener conocimientos desde la base y poder tratar de realizarlo.

jueves, 13 de octubre de 2016


GESTIÓN DEL CAPITAL HUMANO

Las organizaciones dependen directa e irremediablemente de las personas, para operar, producir bienes y servicios, atender a los clientes, competir en los mercados y alcanzar objetivos generales y estratégicos. Es seguro que las organizaciones jamás existirían sin las personas que les dan vida,dinámica, impulso, creatividad y racionalidad, coordinadas por estas personas cuya cooperación es recíproca y esencial para la existencia de dicha empresa.

Hoy en día para que una empresa tenga éxito es necesario que las personas trabajen en equipo y que busquen un objetivo en común.
El capital humano está formado por estas personas, sus talentos y sus competencias, y es la clave para alcanzar el éxito ya que es la mano de obra dentro de una empresa y es el recurso más importante y básico puesto que son los que desarrollan día a día el trabajo de la productividad tanto de bienes como de servicios de una organización y esto con la finalidad de satisfacer necesidades y distribuirlos en el mercado para obtener una utilidad y hacer que la empresa este en crecimiento constante.

Al hablar del capital humano, nos referimos a una cuestión de contenido y de contexto, es importante ofrecer condiciones de trabajo que permitan a estos talentos colaborar y contribuir eficazmente al éxito de la organización.
En el interior de toda organización existen diferencias individuales, sin embargo, las empresas que tratan de alcanzar el éxito, intentan capitalizar todas estas diferencias para aumentar la competitividad. La administración de las diferencias individuales exige evitar dos patrones, la frase “todos se parecen a mí”, es decir olvidar las diferencias y la aceptación de estereotipos sobre las personas con base en el sexo, características, raciales, étnicas o de edad.

Si no se toma en cuenta la existencia e importancia que tienen las diferencias individuales entre los integrantes de la organización, se enfrentarán serias dificultades cuando intenten ser útiles en la práctica al asistir a las organizaciones en la solución de problemas.
Los principios básicos del comportamiento individual que se derivan de las características y de las organizaciones son que las personas tienen capacidades diferentes; tienen necesidades diferentes y tratan de satisfacerlas, es decir, cada individuo puede tener más de una necesidad prioritaria al mismo tiempo; piensan en el futuro y eligen su comportamiento, se comportan de determinada manera para obtener lo que desean y toman decisiones racionales basadas en su percepción de la situación; perciben su ambiente en función de necesidades y experiencias pasadas, actúan con base en su percepción de la realidad, que les permite comprender lo que pueden hacer y alcanzar; las personas reaccionan en forma emocional; los comportamientos y las actitudes son provocados por muchos factores, depende de cada persona y el entorno en el que se desempeña.

Las diferencias individuales se relacionan con diversos factores, tales como las aptitudes, las cuales pueden ser clasificadas en físicas y cognitivas. Y la personalidad, la cual se refiere a lo que es la persona, la estabilidad del comportamiento de una persona a lo largo del tiempo y en diferentes situaciones y también las diferentes reacciones ante una misma situación. Este aspecto de la personalidad contiene cinco dimensiones: La extraversión, el ajuste emocional, la afabilidad, el sentido de responsabilidad y la apertura e interés, las cuales se relacionan con algunos aspectos que influyen en el desempeño de las personas en sus puestos.
La personalidad del individuo es formada fuera de la institución laboral, sin embargo, genera respuestas conductuales dentro de ella, al analizar la personalidad como un factor conductual dentro de un organismo social cabe reflexionar sobre el crecimiento de la estructura organizativa y la demostración o exhibición de la personalidad de sus miembros. De esta manera, las instituciones muy centralizadas, complejas y formales, harán que las actividades de sus empleados sean muy limitadas, dejando de lado su creatividad e ingenio.

Sin embargo es preciso que la estructura organizacional sea menos exigente y sus empleados más participativos, dinámicos, creativos e ingeniosos para poder adaptarse a esos cambios. Es decir, en este tipo de estructura sus miembros pueden mostrar su verdadera personalidad.
Las organizaciones tienen un creciente interés en identificar sus competencias básicas y desde el punto de vista de éstas, una competencia es un conjunto de habilidades y tecnologías y no solo una sola habilidad o tecnología aislada. Lo importante es la integración de las competencias básicas, dando como resultado el aprendizaje colectivo de la organización, la inclusión de distintas corrientes de tecnología y la innovación.  Si se desea obtener una ventaja competitiva, entonces deben definirse y ser localizadas.
Una competencia es considerada básica para una organización si cumple con el valor percibido por los clientes, la diferenciación de sus competidores y la capacidad de expansión.

Una vez que se han definido las competencias básicas, la organización tiene dos opciones, comprar o construir, dos decisiones de las cuales deben concentrarse en la forma en que las personas ingresan a la organización y se mueven dentro o fuera de ella.
Cuando se decide construir competencias por medio de la capacitación y el desarrollo, la clave del éxito está en desarrollar experiencias y especialización que cubran las brechas que pudiera existir entre sus aptitudes básicas. Es necesario utilizar opciones de capacitación, adiestrar a los equipos, adoptar tecnología adecuada e incluir a los clientes en el proceso.

El concepto de diversidad en recursos humanos significa que la calidad está en la diversidad y no en la homogeneidad. La mejor forma de garantizar la diversidad es contratar a las personas para ocupar todos los puestos de la empresa por capacidad. Esto ofrece beneficios tales como lograr procesos, productos y servicios innovadores ya que se necesitan visiones, ideas y formas de hacer distintas. La diversidad de personas, con distintos intereses, formas de ver la vida y experiencias que aliente el desarrollo es asegurarse que las propuestas innovadoras puedan surgir en beneficio del negocio; otro beneficio es que existe una mayor probabilidad de obtener fidelidad y lealtad de los asociados; fomentar un clima de trabajo que estimule el crecimiento de las personas; y la contribución hacia un verdadero agente de cambio dentro de la organización.